La Pélvis es la región anatómica más inferior del tronco. Siendo una cavidad, la pelvis es un embudo osteomuscular que se estrecha hacia abajo, limitado por el hueso sacro, el coxis, los iliacos y los coxales (que forman la cintura pélvica) y los músculos de la pared abdominal inferior y del perineo.

En el ejercicio, en especial en Pilates, se le da suma importancia ya que existen una serie de conceptos anatómicos sobre los que se basa la práctica de Pilates, imprescindibles para desarrollar correctamente los ejercicios de esta disciplina. 

La buena estabilización de la pélvis o de la cadera es muy importante a la hora de proteger, durante las posturas y ejercicios, la parte baja de la espalda frente a las lesiones. En pilates la estabilización es la clave para diferenciar un ejercicio bien ejecutado de uno mediocre.

La posición neutra en los ejercicios de Pilates es algo básico para realizarlos correctamente. En esta posición se mantiene la lordosis natural de la columna, es decir, la curvatura no está ni exagerada ni reducida. Se requiere una contracción a la vez de los músculos abdominales y los extensores de la columna, así poder obtener un buen ejercicio y buenos resultados en tu práctica de Pilates. 

Las sesiones de Pilates y su buena praxis ayudan en problemas como hernias discales, problemas lumbares, y dolencias posturales. Son necesarias sesiones de grupos reducidos, además de una buena comunicación del alumno, para que así, el profesor pueda tener más contacto y corregir cuando sea necesario.